Mujeres campesinas empoderadas ejercen sus derechos económicos con enfoque agroecológico y sostenibilidad ambiental, promoviendo una igualdad efectiva entre varones y mujeres del distrito de Lambrana en Apurímac, Perú

El proyecto se desarrollará en 6 comunidades (Atancama, Caype, Lambrama, Pichiuca, Siusay y Urpipampa) el distrito de Lambrama, región de Apurímac, Perú, con una población de 940 habitantes (50,2% mujeres).

La agricultura y la ganadería son las principales actividades económicas de la población. Las familias emplean el 70% para el autoconsumo y un 30% para la comercialización de proximidad a pie de casa, por lo cual son actividades de poca rentabilidad y diversificación. La lenta reactivación de la economía local tras la pandemia se ha visto nuevamente afectada por la coyuntura política y social del país a cuenta de los paros y bloqueos; provocando además un alza en el coste de vida y una mayor vulnerabilidad de la seguridad alimentaria de las familias. Pese al incremento durante la última década de la participación de las mujeres en algunos espacios como asociaciones y la comunidad campesina, las relaciones comunitarias varón-mujer aún se caracterizan por el arraigo machista y la predominancia patriarcal, en donde las mujeres enfrentan una sobrecarga del trabajo debido a su actividad productiva en el hogar, al trabajo doméstico, al cuidado de la familia y a la crianza de los hijos. El proyecto busca que mujeres del Distrito de Lambrama ejerzan su autonomía económica basada en el asociativismo autogestionado con sostenibilidad y promoviendo la defensa efectiva de sus derechos civiles y económicos, mediante:

1. Mujeres avanzan en su emprendimiento y afirman su derecho a una mayor autonomía personal aumentando sus ingresos mediante la mejora de los estándares de producción: galpones, cuyes y semillas; capacitaciones/acompañamiento técnico (promotoras, agroecología, mercado); protección fuentes de agua; reforestación.
2. Mujeres productoras de cuyes han articulado su producción con el mercado de proximidad, mejorando sus ingresos económicos desde una perspectiva agroecológica: certificación SGP; registro y marca; capacitaciones; ferias locales.
3. Mujeres campesinas de Lambrama luchan por sus derechos en los espacios de concertación e involucran a las autoridades locales para hacer frente a la violencia de género: presupuestos participativos; capacitaciones y podcast (derechos e igualdad, nuevas masculinidades); encuentro y feria distrital de mujeres; congreso ONAMIAP; Comité Interinstitucional para la Defensa de los Derechos de la Mujer.