Asistencia humanitaria y protección de los derechos para la población de Niamey damnificada por los efectos del cambio climático

El proyecto se desarrollará en el asentamiento de Séno en Niamey (Níger).

La región del Sahel Central se enfrenta a una de las crisis humanitarias más complejas y de mayor crecimiento. La escalada de los conflictos armados, la inseguridad y los efectos del cambio climático han generado más de 2,10 millones de personas desplazadas y en 2022, 16,6 millones de personas necesitaron ayuda humanitaria. Níger con una población cercana a los 27,2 millones de personas es uno de los países más empobrecidos (puesto 189 del IDH, 0,394), 4,4 millones de personas sufren de pobreza estructural (50,3% mujeres, 55% menores), y presenta una las tasas de crecimiento demográfico más elevadas (media de 7,2 nacimientos/mujer). Según el INFORM RISK (2023), el país presenta un índice muy alto de riesgo de crisis humanitaria, siendo el mayor riesgo el vinculado al factor humano debido al conflicto y la violencia de los GANE. Las dificultades para controlar a los grupos terroristas de corte islamista activos en los países fronterizos, deja un saldo de 716.444 personas en situación de desplazamiento (50,3% mujeres, 56,2% menores) de las cuales 45.240 están ubicadas en Niamey. La persistente desigualdad estructural de género (puesto 128 en el Índice de Desigualdad de Género) incrementa la vulnerabilidad de las mujeres y niñas desplazadas y refugiadas expuestas a la violencia sexual, matrimonios infantiles, trata de personas, prostitución forzada o el secuestro por parte de grupos terroristas. Adicionalmente, Níger experimenta una alta vulnerabilidad al cambio climático; si bien, el 80% de su territorio se encuentra ocupado por el desierto del Sahara, desde 2020 las fuertes lluvias han provocado graves inundaciones, enormes pérdidas de bienes materiales y afectaron a más de 432.000 personas en Niamey. Con este fin, el proyecto busca facilitar asistencia y protección para 1.308 familias desplazadas (5.172 personas, 2.598 mujeres, 2.574 hombres) por las inundaciones de 2020, mediante:

1. Asegurada una respuesta de calidad y adaptada para la protección de los derechos de 3.745 menores: Mecanismo Comunitario de Protección Infantil (MCPE), Espacio Amigos de la Infancia (EAE), atención y acompañamiento psicosocial.
2. Asegurada la protección de los derechos de 1.856 mujeres y niñas: difusión y sensibilización (derechos, VBG), Comité comunitario VBG, kits de dignidad.
3. Facilitada la recuperación de medios de vida para 150 mujeres y sus familias: conformación y formación de 5 agrupaciones de mujeres, Agentes Comunitarias AV), actividades generadoras de ingresos (cacahuete, cereales, corderos, cosméticos).