Derecho a la tierra, derecho al retorno

Las 7 décadas que Israel lleva aplicando una política de ocupación de tierras palestinas mediante la limitación a la movilidad, la implantación de un sistema de permisos, la denegación del uso y acceso a recursos naturales o una planificación urbanística discriminatoria, afectan a toda la población de Palestina ahondando en la fragmentación y el desarraigo del pueblo palestino.
Los principales problemas, comunes en todos los lugares de intervención del proyecto, son tres:
1) Erosión de los vínculos de la población joven, mayoritaria en todo Palestina, con el territorio como parte de la identidad cultural palestina. A esta erosión contribuye el elevado empobrecimiento de los territorios, donde las posibilidades para los jóvenes de encontrar un trabajo de calidad son bajas.
2) Titulares de obligaciones y responsabilidades no asumen su rol responsable en la protección internacional y garantía de los derechos de la población palestina.
3) Insuficientes mecanismos individuales y colectivos para hacer frente a las políticas de desplazamiento forzado israelíes y ejercer el derecho al acceso a la tierra y los recursos naturales en comunidades palestinas vulnerables.
Ante esta situación, el proyecto propone fortalecer la cohesión social entre población joven refugiada y desplazada interna de toda la Palestina Histórica a través de la promoción de su identidad cultural y derecho a la tierra.