Iniciativa agroecológica para la defensa de la agricultura campesina, la vida, la tierra y el territorio campesino e indígena

El proyecto se desarrollará principalmente en los Estados de México de Chihuahua, Michoacán, Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Puebla y en la península de Yucatán.

El modelo de desarrollo neoliberal dominante y el agronegocio como modelo de producción y alimentación se mantienen en México, en medio de una crisis política, social y económica por la caída de la producción industrial y la tensión en el campo por la eliminación de aranceles a productos básicos mexicanos. El Gobierno se ha caracterizado por el autoritarismo, la defensa de los poderes económicos nacionales y extranjeros. En este contexto, las luchas de los pueblos originarios, comunidades organizadas y campesinas se erigen como garantes de la defensa del territorio, siendo México uno de los países con mayor número de asesinatos a periodistas y a personas defensoras del medioambiente. Además, 14,6 millones de personas están en situación alimentaria grave y 44 millones en inseguridad alimentaria moderada o grave. Los principales signos de agotamiento del campo y agroindustria mexicanos son el bajo crecimiento, la baja disponibilidad de agua de riego, el cambio climático y la baja capacidad para incorporar avances tecnológicos, mientras que la agricultura tradicional persiste como sistema productivo principal de la economía campesina.

El objetivo es impulsar la capacitación técnica y política de las bases de las organizaciones campesinas e indígenas de la Vía Campesina de forma integral con un enfoque de Feminismo Campesino y Popular agroecológico.

La socia local es un consorcio formado por Unión Nacional de Organizaciones Regionales Campesinas Autónomas (UNORCA), Servicios Integrales Emuri, A.C. - SINE, y Unión de Organizaciones de la Sierra Juárez de Oaxaca - UNOSJO.